Una investigación pionera realizada en el Departamento de Didáctica y Organización Escolar de la
Universidad de Granada ha revelado la importante labor social que las Universidades Populares están desarrollando en España, sobre todo en Comunidades Autónomas que tradicionalmente han sido consideradas como menos desarrolladas (Andalucía, Castilla La Mancha y Extremadura).
Este trabajo, llevado a cabo por Juan Antonio López Núñez y dirigido por el profesor Manuel Lorenzo Delgado, es la primera investigación que se lleva a cabo a nivel nacional sobre las Universidades Populares, y que parte de una entidad independiente de ellas. Según sus autores, la labor de estas organizaciones con todo tipo de colectivos (jóvenes en busca de su primer empleo, parados de larga duración, mujeres maltratadas, amas de casa) ha hecho que este proyecto goce de un gran prestigio a nivel nacional, y que el nivel de satisfacción mostrado por los alumnos sea muy bueno.
La investigación realizada en la UGR ha analizado la labor que, a nivel nacional, realizan las más de 300 Universidades Populares que existen en España, mediante encuestas a los directivos, los monitores y los alumnos. Estos centros -que reciben subvenciones de la Comunidad Económica Europea y de algunos ministerios aunque su fuente principal de subvención proviene de los Ayuntamientos - cuentan con más de 3.000 monitores y más de dos millones de alumnos.
Más de un siglo de vida“En nuestro país –explica López Núñez- las Universidades Populares tienen una tradición de más de cien años, y son un verdadero yacimiento de empleo para los diplomados y licenciados en Ciencias de la Educación, titulación con la que cuentan la gran mayoría de los maestros y directivos de estos organismos”.
Las Universidades Populares, apuntan los investigadores de la UGR, tienen como objetivo “potenciar el desarrollo social y económico de aquellas localidades donde se encuentran ubicadas a través de una oferta formativa muy concreta surgida de las propias necesidades de los alumnos”.
Así, la encuesta realizada revela que la media de edad de los directivos de estos centros es de 40.2 años siendo la mayor parte hombres (54.9%) frente a las mujeres (45.1%). El 90% de los directores de Universidades Populares dispone al menos de una titulación universitaria de grado medio (diplomatura), predominando el 58.8% con una titulación de grado superior (licenciatura).
Por su parte, la mayoría de los alumnos son mujeres (80,1%) frente a un 19,5% de hombres, oscilando sus edades entre los 7 y los 72 años con una media de 41.4 años. “Respecto a la antigüedad, encontramos un amplio abanico que oscila desde 1 año hasta los 19 años, con una media de estancia de 4.3 años”, señala el investigador. Un 48.7% de los participantes no llega a disponer de una titulación de grado medio y un 22.8% dispone de alguna titulación universitaria, y además, del total de participantes, un 34% se encuentra en situación de paro y un 65.4% ocupado.
Parte de los resultados de esta investigación -en la que se ha realizado un estudio de caso en la única Universidad Popular de la provincia de Granada (ubicada en Loja)- se han publicado en la prestigiosa revista Bordón y en la
Revista Interuniversitaria de Pedagogía Social.